El vino de Cangas, felizmente recuperado, escribe de nuevo su futuro.

Vendimia 2023: «La Mejor cosecha»

El pasado sábado 7 de Octubre de 2023, la Denominación de Origen Protegida Cangas (DOP Cangas) emitía la siguiente nota:


Vendimia 2023. La mejor cosecha.

Vendimia Cangas del Narcea. Foto: Recrea Asturias

La de 2023 ha sido la vendimia más temprana.  La recogida de la uva en la zona DOP Cangas se desarrolló entre el 31 de agosto y el 2 de octubre, el inicio se produjo en Ibias  nueve días antes que la cosecha anterior  y  se terminó en Cangas del Narcea, dos días antes que el año anterior.

Sabíamos que había sido un buen año para las vides, todo indicaba una buena calidad debido a que ha sido un año de altas temperaturas y muy seco, aunque hemos tenido lluvias ya una vez iniciada la vendimia.

En cuanto a los pronósticos de cantidad, aunque indicaban una buena cosecha, finalmente nos ha sorprendido siendo el balance oficial de la uva recogida, mayor de lo estimado.

El total de producción fue de 231.780 kg de uva, el aumento de producción con respecto a la cosecha anterior ha sido de un 164,2% convirtiéndose en la mayor cosecha de la DOP Cangas hasta la fecha, superando la cosecha 2005 que había sido hasta ahora la mayor, con 152.000 kg.

De la producción recogida en 2023 un 52,5 %, fueron de uva blanca y el resto un 47,5 % uva negra.

De los 121.690 kilos de uva blanca, 118.084 kg son Albarín blanco, se han recogido también pequeñas cantidades de Blanca Extra, Moscatel, Godello y Albillo. El Albarín blanco se confirma otra cosecha más, como la variedad estrella de la DOP Cangas,  al ser la de mayor producción y sus cifras irán en aumento en los próximos años , porque han entrado en producción las nuevas plantaciones.

Por su parte, las variedades tintas suman un total de 110.089 kg  encabezadas este año por la Mencía con una producción de 42.799 kg y el Albarín negro del que se han recolectado un total de 34.340kg , seguidas del Carrasquín con 20.194 kg y la Verdejo negra con 12.756 kg.  

Pisada de la uva en la fiesta de la Vendimia de Cangas del Narcea. Foto: Recrea Asturias

Si hubiese que resumir la cosecha en una sola palabra, sería: «uniformidad», algo que no se suele dar en agricultura y es que salvo la variedad Albarín negro que ha tenido algún problema de corrimiento de flor, todas las variedades autóctonas y todas las parcelas estaban con muy buena producción no habiendo diferencias por zonas, ni siquiera diferencias entre los viñedos situados en Cangas del Narcea y los situados en Ibias.  La producción media por hectárea se sitúa este año en 4.139 kg.

Esta vendimia refleja por fin el resultado de los cambios que se han ido produciendo consecuencia de la profesionalización del sector:  reestructuración y plantaciones nuevas que lamentablemente en los dos años anteriores no se han podido evidenciar debido la climatología y los problemas sanitarios.

Tras tres cosechas muy pequeñas esta vendimia se cierre con mucha alegría para nuestros heroicos viticultores, producción que ya está en manos de los bodegueros y que en próximos meses podremos empezar a disfrutar.

 

Denominación de Origen Protegida Cangas


El proceso

Un proyecto cangués finalista en la Beca Enate 2020

El proceso

Nuestro paisano, el artista y diseñador Francisco Jesús Redondo Losada (Cangas del Narcea, 1968), acaba de quedar finalista de la Beca de Arte ENATE 2020 con esta pieza en la que la protagonista es una vieja cepa de la ribera del Narcea. El proceso seguido nos lo cuenta él mismo, acompañándolo de una imagen de una de las estampas y un enlace a su blog donde se puede ver el trabajo completo y el movimiento de la cepa.


El Proceso

Proyecto finalista en la Beca Enate 2020

«La Beca de Arte ENATE se convoca con el objetivo de apoyar a artistas, no consagrados y con una trayectoria contrastable, con un premio de 6.000€.

Este año, la convocatoria ha alcanzado un récord de participación, optando a la misma las obras de 400 autores nacionales e internacionales con diferentes técnicas.

“De la cepa de una vid vieja de “la ribera del Narcea” corto 12 rodajas de forma consecutiva, cada una de éstas se escanea en alta resolución (3200ppp). Las imágenes las imprimo sobre papeles Willian Turner de Hahnemühle de 310 gramos, a un tamaño de 100 x 100 cm. Cada estampa lleva dos impresiones de la misma rodaja, la segunda impresión está hecha a un 50% de tinta y va girando sobre sí misma en pautas de 15 grados. El resultado son 12 estampas cuya matriz son las huellas que contiene el tronco de una cepa.

Las imágenes son a la vez fotogramas de una animación que muestran el movimiento que el troco tiene impreso de forma natural dentro. Al tratarse de una planta leñosa, su impronta viene marcada por líneas o radios concéntricos y suaves anillos. Cada obra lleva, al lado de la numeración de estampa, un código QR que contiene la animación del movimiento.

En el proceso me di cuenta que el resultado se asemeja a una célula, una flor de la vid, una mancha de vino estampado sobre un papel…

De la semilla, al tronco, la flor, el fruto y a la mesa. Pasando siempre por el proceso de manipulación.

Parafraseando “…todo está en la materia, sólo hay que encontrarlo…”»

Francisco Redondo

Enlace: EL PROCESO

 

 

Los vinos asturianos se presentan a los Sumilleres de Palencia

Cata de vinos de Cangas del Narcea en Palencia, noviembre 2017

El pasado lunes 13 de noviembre, Pequeñas D.O.’s junto con las Asociación de Sumilleres de Palencia, organizó una cata de vinos asturianos en el Restaurante El Chaval de Lorenzo de Palencia (Paseo del Salón, 3), sede de la Asociación Palentina de Sumilleres en la que se cataron cinco vinos producidos en el Principado. El objetivo de la cata fue el de continuar expandiendo entre los prescriptores palentinos las características de los vinos asturianos, que por su proximidad geográfica deberían de tener una mayor presencia en la hostelería local, y que poco a poco están obteniendo un mayor reconocimiento en los mercados, tanto nacionales como internacionales.

Asturias es junto a Priorato y la Ribera Sacra una de las regiones vinícolas en las que se da lo que se conoce como “viticultura heroica”, que consiste en viñedos ubicados en pronunciadas pendientes de muy difícil acceso que no permiten la mecanización y en las que en muchos casos se dan variedades de uva muy poco extendidas en el resto del territorio nacional.

La producción vinícola asturiana se da en la parte suroccidental de la provincia y a pesar de la gran tradición vinícola que hubo en la zona a finales del siglo XIX en la actualidad, hay algo menos de 100 hectáreas dedicadas a la producción de vides, de donde se obtienen unas variedades de uva autóctona como son la verdejo negro, la carrasquín y la albarín tanto tinta como blanca, que son variedades prácticamente desconocidas por el gran público, por lo que el objetivo de la cata del pasado lunes fue la de acercar estas variedades a los sumilleres palentinos para que así contribuyan a difundir las bondades de estos vinos.

Las dos bodegas que asistieron a la cata fueron: Bodega Monasterio de Corias y Bodegas Vitheras, ambas con una tradición de más de 400 años produciendo vinos en unas condiciones de “viticultura heroica”, que es así como se conoce a la viticultura que se desarrolla en terrenos de dificultad en su cultivo y que dan indudablemente un valor adicional a estas producciones.

Los cinco vinos que catamos en el transcurso de la cata fueron:

  1. Vitheras Albarín Blanco 2015 de Bodegas Vitheras
  2. Corias Guilfa Blanco 2016 de Monasterio de Corias
  3. Vitheras Lucia Rosado 2015 de Bodegas Vitheras
  4. Valdemonje Carrasquín Tinto 2013 de Monasterio de Corias
  5. Valdemonje Albarín Tinto 2013 de Monasterio de Corias

¿Qué es Pequeñas D.O.’s?

Pequeñas D.O.’s es una empresa cuyo objetivo es la promoción de las Pequeñas regiones vinícolas españolas, fuera de un ámbito estrictamente local con el objetivo de dotarlas de una mayor visibilidad en los mercados y de apoyar variedades autóctonas que sin este tipo de iniciativas pueden llegar a caer en el abandono.

Nueva web para promocionar las Pequeñas Denominaciones de Origen del sector del vino de España

La gran cantidad de información que vemos a diario en los medios de comunicación sobre las regiones vinícolas más tradicionales de nuestro país, que o bien por su tamaño o bien por su historia, han sabido posicionarse como referentes en el sector, nos llevan a olvidarnos de otras muchas zonas productoras que sin duda merecen la atención de cualquier aficionado a los buenos vinos.

Desde Monterrei en el interior de Galicia, hasta Binissalem en las Islas Baleares o la pequeña Isla del Hierro en las Islas Canarias, en Pequeñas D.O.’s hemos seleccionado un total de 59 regiones vinícolas, todas ellas con una producción por debajo de las 2.500.000 botellas y repartidas en un total de 15 Comunidades Autónomas y 30 provincias. Con el fin de preservar la calidad de las regiones seleccionadas, hemos escogido solamente aquellas regiones que se encontraran en alguno de los cuatro primeros escalones de la pirámide de calidad de los vinos españoles, es decir, se han seleccionado zonas geográficas que se encuadraran como Vinos de Pago (V.P.), como Denominaciones de Origen Calificadas (D.O.Ca), como regiones adscritas a Denominaciones de Origen (D.O.) o bien aquellas regiones amparadas como Vinos de Calidad con Indicación Geográfica Protegida (V.C.I.G.P.), dejándose fuera aquellas regiones que se encuadraran como Vinos de la Tierra o como Vinos de Mesa.

En concreto y en el Principado de Asturias hay una Pequeña D.O. (Cangas del Narcea) por lo que pensamos puede resultar interesante su publicación por el interés que puede generar entre sus lectores.

Esta web pretende ofrecer de manera sencilla y visual las noticias más relevantes acaecidas en todas las Pequeñas D.O.’s que aquí se recogen, así como una completa información de las características más relevantes de cada región vinícola y una relación completa de las bodegas que la forman, siendo dos nuestros objetivos básicos: por una parte, ayudar a todas estas regiones vinícolas a buscar un nicho en el que posicionarse en los mercados, frente a las tradicionales grandes regiones vinícolas y por otro, aunar esfuerzos y buscar sinergias entre estas Pequeñas D.O.’s para dotarles de una fuerza de la que por sí solas carecen.

Esperamos que sirva como un escaparate para los vinos españoles elaborados en estas pequeñas regiones y que sin duda sirva para impulsar su imagen y les ayuden a obtener un reconocimiento en los mercados que hasta la fecha consideramos no ha llegado.

www.pequenasdos.com


La viticultura heroica de Cangas de Narcea

Viñedos en montaña de la bodega Viticultores Heroicos Asturianos

Viticultura de montaña es aquella con unas condiciones de medio ambiente y trabajo de la viña singulares, como unas circunstancias orográficas que impiden la mecanización, una altitud mínima de 500 metros sobre el nivel del mar y en zona de montaña no en meseta, cultivos en pendiente con un desnivel mínimo del 30 por ciento, de tamaño pequeño y con parcelas en terraza.

Valle de Aosta (Italia), Douro (Portugal), Renania-Palatinato (Alemania) y el Cantón de Valais (Suiza) son algunos de los territorios de la llamada también viticultura heroica, y que en España está representada al menos por Ribeira Sacra , en Galicia, y la zona de Cangas del Narcea, en Asturias.

Sí, viñas y, por supuesto, vino en Asturias. La vid está presente en esta región desde hace más de mil años, y centrada su presencia en la zona occidental, en el entorno de los profundos valles que marcan el camino de los ríos Navia y Narcea. La eclosión del viñedo en Asturias vino de la mano de los monjes benedictinos, tras la fundación del Monasterio de San Juan Bautista (Corias, Cangas de Narcea), en el año 1032 y durante ocho siglos se mantuvo tal, y masiva por momentos, presencia, hasta la llegada de la filoxera a finales del siglo XIX.

A principios del XX se recuperaron especies autóctonas, aparecieron otras foráneas y el cultivo y consumo de vino volvió a resurgir, aunque no con idéntica fuerza y no por muchos años. Hacia 1945 se empiezan a abandonar las viñas, en parte por la misma razón que ahora resurgen: imposibilidad de mecanizar las labores por dedicarse a viñedo los terrenos con mayor pendiente. Las cifras que hemos rescatado de hectáreas plantadas de cepas nos aproximan al desastre: 5.493 hectáreas en 1858; 1.878 en 1903, 507 en 1975, y 146 hectáreas en 1989.

Las vides se encuentran en un desnivel mínimo del 30 por ciento

¿Era el fin o el principio? Era el principio, gracias al trabajo de investigación de personas como una científica del CSIC, María del Carmen Martínez, a partir de 1986 con la recuperación de variedades de uva como albarín blanco, verdejo negro, albarín negro y carrasquín. Y de grupos de personas como la Asociación de Productores de Vinos de Cangas (Aprovican), nacida en 1997 con el fin de proteger el patrimonio vitivinícola de la zona de Cangas del Narcea. Y, al fin, de los organismos públicos que, a partir de 2001, empiezan a implicarse en la protección de los viñedos, con el reconocimiento como Denominación de Vinos de la Tierra de Cangas, calificados desde finales de 2008 como Denominación de Origen Protegida.

Ahora, por supuesto, la principal labor está en manos de las bodegas, y de los vinos que elaboran, blancos, tintos y rosados. Y a las cinco (Antonio Álvarez, Chacón Buelta, Monasterio de Corias, Muriella y Vides y Vino de Asturias) que han provocado un importante salto de calidad, sobre todo en lo que respecta a los blancos y con la uva albarín como protagonista, se les ha añadido una sexta: Vitheras (Viticultores Heroicos Asturianos).

Su historia «se remonta al siglo XVI, en concreto al año 1556 en los que se tiene el documento más antiguo que habla sobre la existencia de los viñedos de la familia y de su comercialización». Esa misma viña, según explican sus responsables, «es la que está en producción ahora y replantándose hasta llegar a las siete hectáreas». Todo queda en manos de nuevas generaciones y, en el caso que nos ocupa «es la última de la casa de Don Juan»: Carlos Ron Martínez, Laura Ron Martínez, Miguel Lomba Martínez y Pablo Lomba Martínez han tomado el testigo de sus abuelos, «que, durante sus 80 años de vida, han cuidado las vides de estos valles afilados del rio Cibea», próximos a Cangas de Narcea.

Nacida en el verano de 2014, «la bodega ha elaborado un vino blanco, ya con el premio de una medalla de oro en el concurso internacional de viticultura heroica del Cervim (Centro de Investigación, Estudio, Salvaguarda, Coordinación y Valorización de la Viticultura de Montaña), y un vino rosado, que ha sido el primero de Asturias. Los objetivos de Vitheras son «la recuperación del paisaje vitícola de la zona y la industria vinícola de la región, la reactivación económica del área y elaborar un producto a la altura de una gastronomía con gran fama nacional e internacional como la asturiana».

Vitheras blanco 2014

  1. Nuevas vidas que se aproximan al mundo del vino. Nuevas tierras de albarín, una uva que hecha vino se muestra franca, fresca, muy pegada al terruño y que, al recibir un toque de moscatel, obtiene mayor presencia, dulzura, incluso un toque de elegancia. Así es este Vitheras que acaba de nacer y ya ostenta carácter y personalidad.
  2. Puntos: 92. Precio: 25-30 euros. Añada: 2014. Variedad: albarín blanco con un pequeño porcentaje de moscatel. Bodega: Vitheras. Cangas de Narcea (Asturias). Tel: 917 080 450/676 921 948. www.vitheras.es

Publicado en el diario ABC, 06/11/2015

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Un equipo del CSIC promueve el occidente asturiano como destino enoturístico

Impulsa la recuperación de la viticultura heroica en el Principado

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Viñedos en las proximidades de Limés (Cangas del Narcea). Foto: MERA

El Equipo de Investigación de Viticultura del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha constituido un equipo interdisciplinar para potenciar el desarrollo sostenible y consolidar el occidente asturiano como destino enoturístico de referencia “poniendo en valor la viticultura como elemento indispensable de la cultura, el paisaje y la tradición”.

Según indican desde el organismo en nota de prensa, la recuperación de la viticultura heroica en Asturias promovida en los últimos años por el CSIC “ha potenciado el despegue de un sector vinícola competitivo y el desarrollo sostenible de la zona occidente como destino enoturístico de referencia nacional e internacional ligado a la cultura, el paisaje, la tradición y la conservación del patrimonio”.

De este modo, el Grupo de Viticultura del CSIC ha creado un equipo interdisciplinar de trabajo integrado por nueve instituciones y entidades que contribuyen a la puesta en valor de la viticultura heroica desde diferentes ámbitos: científico, económico, cultural, social y desarrollo rural.

Representa un 5% a nivel mundial

Y es que, esta viticultura solo representa un 5% a nivel mundial por sus características vinculadas a zonas de montaña, altitud superior a los 700 metros, en fuerte pendiente y en pequeñas islas, explican desde el CSIC.

Actualmente, más de 100 hectáreas de terreno se dedican al cultivo de variedades de vid únicas y autóctonas de la zona de Cangas del Narcea (albarín blanco, albarín tinto, verdejo negro y carrasquín), recuperadas por los investigadores del CSIC y que, desde hace seis años, se comercializan en exclusiva para los viticultores de Asturias.

El CSIC había iniciado los trabajos de investigación en 1986, cuando la viticultura de montaña había desaparecido, para determinar, localizar, conservar y potenciar las variedades autóctonas que, mediante un sistema de selección clonal, fueron reproducidas e introducidas de nuevo en el mercado. “Esta labor propició, asimismo, la profesionalización y modernización del sector bodeguero, que elabora vinos amparados por el Consejo Regulador de la Indicación Geográfica Protegida ‘Vino de la Tierra de Cangas’, integrante del grupo interdisciplinar que se centra en conseguir la denominación de origen”, apuntan desde el equipo de investigación.

Desde Zhejiang al Monasterio de Corias en busca del vino selecto: ¡los chinos sí que saben!

Importadores chinos de Zhejiang de visita en Cangas del Narcea a las viñas de la Bodega Monasterio de Corias

Una de las razones de la existencia de figuras de calidad, en este caso el Vino de Calidad de Cangas, que ampara nuestras elaboraciones tradicionales, es la salvaguarda de su origen, de sus productores y elaboradores y por ende de las zonas donde la actividad se desarrolla.

En un país de tradición milenaria como es China, esto lo entienden y así el importador chino de Zhejiang se ha fijado en nuestra zona, en la Bodegas Monasterio de Corias, para llevar a su mercado una pequeña partida de botellas de vino de la gama más alta de la bodega que permita a sus consumidores conocer de primera mano lo que estamos realizando en la zona.

Previamente el importador realizó una visita a Cangas con objeto de conocer el origen del vino que llegará a su mercado, después de una intensa jornada donde pudieron conocer las instalaciones de la bodega y alguno de los viñedos donde se produce la uva que después se integrará en el vino que los consumidores chinos pudieron empezar a degustar coincidiendo con el nuevo año chino.

Visita a Cangas de importadores chinos con objeto de conocer el origen del vino

Los mayores expertos del mundo del vino y la gastronomía reunidos días atrás en Barcelona, llegaban a la conclusión que la tendencia del vino se encamina hacia la recuperación de las variedades propias, menos graduación alcohólica, menos presencia de la madera que enmascara y uniforma los vinos, en definitiva vinos más delicados, sin trampas ni disfraces, todo eso lo tenemos en la zona, gracias al trabajo de nuestros viticultores en esas viñas de montaña y al trabajo realizado en bodega durante los últimos años. Filosofía que los consumidores chinos buscan y hasta Asturias, hasta Cangas han llegado y llevado el fruto de una tradición que se remonta varios siglos atrás.

Enlace a la fuente de la noticia: AsturiasMundial

‘Viticultura heroica’ en Cangas del Narcea

Se han presentado en Cangas del Narcea las conclusiones de un estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, CSIC, que ha confirmado que también en los terrenos de montaña y escarpados pueden darse viñedos, y por tanto se puede producir vino. Este es un vino diferente pero apto para el consumo, variedades singulares cultivadas en condiciones particulares que generan vinos excepcionales.

Únicamente el 5% de la viticultura mundial se realiza de esta forma, la denominada ‘viticultura heroica’.

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“Viña Grandiella” 2011, medalla de oro en el Concurso Internacional de Vinos de Montaña

altEl vino blanco Monasterio de Corias “Viña Grandiella” 2011 ha obtenido la medalla de oro en el XX Concurso Internacional de Vinos de Montaña, celebrado en Aosta (Italia).

Este certamen es el único concurso internacional que valora los vinos elaborados en zonas de montaña adscritas al Centro de Investigación, Estudio, Salvaguarda, Coordinación y Valorización de la Viticultura de Montaña (CERVIM), un organismo constituido en 1987 específicamente para valorar y salvaguardar la viticultura heroica.

Los criterios que definen esta viticultura heroica es que se lleve a cabo en terrenos con más del 30% de pendiente, con una altitud superior a 500 metros sobre el nivel del mar, que las viñas estén ubicadas en terrazas de cultivo o paratas o la que se realiza en islas de pequeño tamaño.

Durante el concurso 24 catadores técnicos y 6 periodistas del sector probaron los 601 vinos registrados procedentes de 12 países europeos y exclusivamente de zonas de montaña de los que 598 vinos fueron finalmente admitidos y se concedieron dos medallas de oro dobles, 44 medallas de oro y 135 medallas de plata.

El Monasterio de Corias “Viña Grandiella”, único vino español que alcanzó la Medalla de Oro en su categoría, está elaborado mayoritariamente con Albarín blanco, una variedad propia de la zona, y está encuadrado dentro de los Vinos de Calidad de Cangas.

NOTICIA RELACIONADA: Cangas da en el blanco

El hostelero Vicente Merino lanza unos vinos asturianos y ecológicos

Vicente Merino, en La Moderna, con las dos botellas de los nuevos vinos. Foto: Nacho Orejas

Nibias y Roxil son nombres de dos nuevos vinos asturianos cien por cien ecológicos, de Ibias, para más señas, y que tienen en Oviedo su trampolín para lanzarlos por España. El hostelero entreguín Vicente Merino, entusiasta de la plaza San Miguel de Oviedo, donde se asienta con sus caldos en La Moderna, y dinamizador de esta zona con múltiples actividades a lo largo de todo el año, piensa que a la crisis hay que hacerle frente creyendo en iniciativas que se puedan vender a un precio competitivo.

Hace unas semanas se presentaba en este periódico otra singular iniciativa, la de la primera cerveza elaborada exclusivamente con escanda asturiana y también totalmente ecológica en Ca Beleño. Algo se está moviendo en Oviedo.

La historia de hoy empezó en el año 1032, con los viñedos de los monjes del monasterio de Corias, en Cangas del Narcea, y el ciclo se cierra ahora en la plaza ovetense de San Miguel. El hostelero Vicente Merino y su socio Víctor Chacón, sin miedo a la crisis económica, se embarcaron en la aventura de hacer vino con uva autóctona, una de ellas aseguran que es única en el mundo.

Partieron de la bodega de Chacón Buelta, en Degaña, donde hasta ahora se estaban haciendo sólo blancos con 6.000 kilos de uvas, que daban para unas 5.000 botellas. Como marca le pusieron Nibias, porque la mayoría de los viñedos están en el pueblo de Uría, en Ibias. Cultivan en total 2,5 hectáreas y en otro pueblo, el de Cecos, se dedican al albarín blanco, una uva autóctona que solo la hay en Cangas del Narcea.

En junio confían en sacar al mercado cuatrocientas botellas de tinto verdejo. Será la prueba que les indique según los resultados si van por el buen camino. Y como no quieren dar puntada sin hilo recurrieron a la fermentación maloláctica en barrica de madera, como se hacía en el sur de Francia. Se trata de una técnica con la que el ácido málico que se encuentra en la pulpa de las uvas se transforma químicamente en ácido láctico.

Ahora, comenta Merino, están en el proceso de clarificaciones, técnica que ejecutarán a la vieja usanza, es decir, con clara de huevo. La pequeña producción lo permite. Además, las botellas de Magnun, las de litro y medio, las embotellarán a mano e irán lacradas y numeradas. Para las de setenta y cinco centilitros emplearán el método industrial tradicional de envasado.

«Y con este vino, que podríamos decir que está hecho en casa, iremos a participar en los concursos nacionales para pasear el nombre de Oviedo y de Asturias con un sólo objetivo: ofrecer calidad y singularidad», resumió Merino.

Y es que con una producción de cuatrocientas botellas, añadió, «no podemos buscar dinero, solo la excelencia que la da un trabajo bien hecho, y si todo va bien el año que viene la producción será mayor, y si no, quedará el trabajo bien hecho».

El hostelero y también bodeguero apostó por tirar por el vino de Asturias y por nuestra uva autóctona, la del verdejo tinto, por la que apuesta desde el CSIC la investigadora de Cangas del Narcea, Carmen Martínez, que es toda una autoridad en la materia», comentó Merino.

El hostelero ovetense insiste en que este verdejo «no lo hay en ningún lugar del mundo», y que gracias al enólogo francés Gregori Pérez, que se formó en Burdeos, «le estamos sacando sus mejores cualidades».

¿Hay nicho de mercado? La respuesta de Merino no se hace esperar. «En el caso del vino blanco logramos bajar el precio a la mitad reduciendo costes primero en la recolección de la uva y después en la elaboración y el embotellado, pero con el objetivo de mantener siempre la calidad».

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Segunda cosecha de L.lumés, el primer vino etiquetado en asturiano

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L.lumés de Bodegas Obanca, el primer vinu etiquetáu n’asturianu.

La empresa familiar Bodegas Obanca, de Cangas del Narcea, saca al mercado esta semana la añada 2010 del Vino L.lumés, el primer caldo de la zona etiquetado íntegramente en asturiano.

La segunda cosecha de este vino cangués vuelve a ofrecer al público la oportunidad de disfrutar de un producto de variedad verdejo tinto, uva de cepas centenarias exclusiva de las orillas del Narcea, y que a lo largo de 9 meses madura en barricas de roble francés alcanzando una graduación de 13%.

La aparición de la añada 2008 de L.lumés, en 2010, supuso un revulsivo tanto para los vinos hechos en Asturias como para la vinculación de los productos asturianos con la lengua asturiana, según señala la bodega en una nota prensa. La gran acogida popular y mediática hizo que se acabase toda la producción en pocos meses, haciendo imposible encontrar botellas en los establecimientos.

En noviembre de 2011, recibió el Pegollu de los XXVII Premios Andrés Solar convocados por la Xunta pola Defensa de la Llingua Asturiana por “su apuesta pionera por la visibilización y normalización del asturiano en un sector productivo y comercial emblemático de Asturias”.