Cabecera de la primera época de El Distrito Cangués
En el artículo dedicado a El Narcea comentamos que este periódico cangués, fundado en 1906, había pasado en julio de 1912 a ser propiedad de Luis Martínez Kleiser (1883-1971), que aspiraba a convertirse en diputado a Cortes por el distrito electoral de Cangas del Narcea, desplazando a Félix Suárez Inclán (1854-1939), miembro del partido liberal que ocupaba este puesto desde hacia más de dos décadas. En consecuencia, El Narcea se convirtió en esta segunda época en un vocero de los méritos de este político ultraconservador y de sus partidarios, los kleiseristas, y en enemigo de Suárez Inclán que contaba con el apoyo de los liberales cangueses, pero también de la mayoría de los conservadores y de muchos republicanos, que formaban el grupo de los denominados inclanistas.
Esta situación obligó a los partidarios de Suárez Inclán a crear un nuevo periódico semanal que titularon El Distrito Cangués. Sus fundadores fueron el republicano Higinio García del Valle y Luis Arce Díaz. El primer director fue el maestro Ibo Menéndez Solar, que había sido fundador y también director de El Narcea. El jefe de redacción era el maestro republicano Odón Meléndez de Arvas, natural de Cibuyo, y como administrador figuraba Luis Arce Díaz.
El primer número de El Distrito Cangués salió a la calle el 8 de abril de 1913, tenía un formato de 40 x 28 cm. y cuatro páginas, y se tiraba en la Imprenta Moderna, de Cangas del Narcea, que era la misma en la que se hacia El Narcea. En la primera página de ese número aparece un articulo titulado “Nuestros propósitos”, en el que se enumeran los motivos de su aparición:
“Ajenos estábamos de tener que publicar este semanario del que no veíamos necesidad alguna, porque entendemos que para defender los intereses morales y materiales de este Distrito, bastaba bien uno; pero es visto que “El Narcea”, desde su aparición en esta segunda época, más que procurar desde sus columnas el fomento de aquellos intereses, ha levantado aquí la bandera de la discordia, procurando, sin reparar en medios, desunir a un pueblo que siempre vivió sin estas funestas guerras intestinas”.
A continuación se enumeran los méritos de Félix Suárez-Inclán, al que estiman un “titán”, frente a Martínez Kleiser, al que consideran un “niño”. El artículo termina con los siguientes principios:
“1ª. Que consagraremos toda nuestra labor a la prosperidad del Distrito electoral de Cangas de Tineo, y a tener a nuestros lectores al corriente de todo aquello que más interesa al público, para lo que contaremos con buena información.
2ª. Que como amantes sinceros del Distrito electoral, defenderemos con todas nuestras energías la candidatura de Excelentísimo Sr. D. Félix Suárez Inclán para diputado a Cortes, porque solo así se defienden los intereses del país.
3ª. Que despreciamos las diatribas que tengan por objeto hacernos descender a las polémicas de plaza pública”.
El contenido de El Distrito se dedicará casi exclusivamente a Cangas del Narcea. No habrá secciones provinciales, ni nacionales, y solo publicará de vez en cuando artículos de opinión sobre política nacional e internacional. Todas sus páginas están dedicadas a la política canguesa (con criticas furibundas a Martínez Kleiser y sus partidarios), a artículos relacionados con el concejo y otros municipios vecinos (Allande, Ibias, Tineo), a los cangueses emigrados en La Habana o Madrid y a noticias locales que se publican en la sección “La semana canguesa”. Como su primer director y redactor eran maestros de escuela, aparecen a menudo artículos sobre la enseñanza pública, las escuelas y los maestros en el concejo, así como sobre los campesinos y la agricultura, temas que interesaban mucho a Odón Meléndez de Arvas. En todos los números se publicaba el registro civil. El Distrito Cangués está lleno de pequeñas noticias cotidianas y sin duda en él se recoge la mejor crónica de la vida canguesa que podemos tener de esos años.
En diciembre de 1913 cambia la dirección del periódico, que pasa a manos de Benemérito de Llano, miembro de la importante familia de los Llano que en política eran del partido liberal y seguidores de Suárez Inclán. En este periodo, de poder absoluto de los inclanistas, miembros de esta familia ocuparán diferentes puestos políticos como la alcaldía de Cangas, que ostenta José Mª Díaz López “Penedela”, sobrino político de Benemérito de Llano; también serán concejales del ayuntamiento de Cangas, diputados provinciales e incluso gobernadores civiles. Como jefe de redacción y administrador de El Distrito Cangués seguirán los mismos de la etapa anterior.
Ejemplar de la segunda época de El Distrito Cangués
En 1914, con el fin de abaratar el coste de la impresión, el periódico deja de publicarse en la Imprenta Moderna y comienza a tirarse en una vieja imprenta con prensa de mano que poseía Higinio García del Valle. Para trabajar en la imprenta se contrató a Gumersindo Díaz Morodo, conocido como Borí, que era tipógrafo, republicano y colaborador de la prensa republicana. El 2 de mayo de 1914 salió el primer número tirado en esta prensa de mano, que correspondía con el número 53. Tenía un tamaño más pequeño que los ejemplares anteriores, 32,5 x 22 cm., pero el doble de páginas: ocho.
El periódico se va haciendo paulatinamente más y más republicano. En el número 75, del 3 de octubre de 1914, escribe Pinón de la Freita (seudónimo de Jesus Pérez Castro):
“Ni soy kleiserista, ni soy inclanista. No esperé esta ocasión para demostrarlo. Soy pura y simplemente un republicano, y con este ideal como equipaje emprenderemos el viaje para el otro barrio. Y soy republicano, porque, entre mis muchas faltas, tengo la virtud de anteponer a la supremacía del nacimiento el verdadero mérito”.
Comienza una sección nueva con el titulo de “Textos escogidos” en la que se publican fragmentos de artículos de Francisco Pi y Margall, Emilio Zola, Miguel de Unamuno, Rafael Altamira, Rosario Acuña o poemas de Rubén Dario. Con el estallido de la Primera Guerra Mundial en julio de 1914, El Distrito Cangués será acérrimo enemigo de Alemania y partidario de Francia e Inglaterra: “la causa de los aliados es la causa de la libertad, de la civilización, de la democracia y del derecho” (nº 84, 5 de diciembre de 1914).
En los primeros días de abril de 1915, el periódico pasa a manos del mencionado Gumersindo Díaz Morodo, Borí, según él “por las desavenencias entre sus propietarios D. Higinio G. del Valle y D. Luis Arce”. En la cabecera del número 100, publicado el 3 de abril de 1915, aparece Borí como “director propietario”. Según sus propias palabras, en el periódico él se encargaba de todo:
“Yo era todo en él: lo componía, lo imprimía, lo administraba, lo distribuía, lo empaquetaba y hasta lo llevaba a correos. Y no digo que lo escribía porque, aparte de algo de colaboración, lo demás se componía sin cuartillas. No tenía tiempo que perder. Cuando más, unas concisas notas me servían de orientación para que, componedor en mano, saliesen de la caja el artículo o los artículos que deseaba, aunque pasasen del centenar de líneas».
Borí convertirá El Distrito Cangués en un medio de lucha contra la injusticia y el caciquismo, y especialmente contra el alcalde de Cangas del Narcea. Así lo cuenta él mismo en un texto escrito en 1925:
“Con El Distrito Cangués ocurrirá lo que con otras muchas publicaciones. Un periódico fundado por y para los caciques se volvió contra ellos. Yo había iniciado en el concejo la lucha anticaciquil, creo que en el año 1910, sufriendo por ello toda clase de persecuciones y atropellos, y al hallarme con un periódico de mi propiedad consideré como ineludible deber de ciudadanía no silenciar las inmoralidades y barbaridades de un caciquismo feudal, poniendo mi pluma al servicio de la causa de los oprimidos y vejados habitantes del concejo”.
Recibo de suscripción a El Distrito Cangués de Mario de Llano, que será alcalde de Cangas del Narcea durante la Segunda República Española
Borí publica artículos muy críticos con el estado del concejo y de la villa, y ataca duramente al alcalde, lo que le causa muchos problemas, denuncias, procesamientos, secuestro de ejemplares y al final el cierre definitivo del periódico. Intentó evitar esto último, trasladando la imprenta al vecino concejo de Leitariegos, y por eso los número 166 y 167, de 22 y 29 de julio de 1916, aparecen editados en ese lugar, e incluso, cambiando el nombre del periódico, por el de El Distrito de Cangas, del que se publicaron solo tres números en el mes de agosto de 1916. Para contrarrestar las opiniones de Borí, el alcalde Díaz López fundó en julio de 1916 otro periódico, La Voz de Cangas, que se publicará durante dos años. Sin embargo, todos los esfuerzos de Borí no sirvieron para nada y en agosto de 1916, el juez de Cangas ordenó el embargo de la imprenta, terminando así definitivamente la publicación de El Distrito.
La colección de El Distrito Cangués que ponemos a disposición de los lectores de la web del Tous pa Tous no esta completa. Comienza en el número 62, de 4 de julio de 1914, y termina en el número 167, de 29 de julio de 1916. Pero tampoco están todos los ejemplares comprendidos entre estos dos números, faltando algunos ejemplares. Asimismo, después del último número de El Distrito Cangués, están los tres ejemplares de El Distrito de Cangas que publicó Borí en agosto de 1916. Toda esta colección pertenece a la biblioteca de don Luciano Castañón, de Gijón, y nos fue facilitada amablemente por su hijo Chema Castañón. La digitalización ha sido sufragada por Ortopedia Moreno, de Cangas del Narcea.
Lista de suscriptores de El Distrito Cangués en la villa de Cangas en 1915
Suscriptores de El Distrito Cangués en los concejos de Cangas del Narcea e Ibias en 1915